Nicaragua enfrenta el año 2024 con perspectivas económicas alentadoras, según los datos revelados por el Banco Central de Nicaragua (BCN) en el informe Perspectivas Macroeconómicas 2023-2024, y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El BCN establece un rango de crecimiento de la actividad económica entre el 3.5% y el 4.5% para 2024. Esta proyección se sustenta en la dinámica positiva sectorial observada en el año que recién terminó, señalando la persistencia de un crecimiento robusto. Complementariamente, el FMI estima un crecimiento continuo del 3.5% en 2024, principalmente impulsado por el consumo privado.
La convergencia de estas cifras sugiere un panorama optimista para el desarrollo económico nicaragüense, destacando la solidez de sectores claves y la confianza en la resistencia de la economía.
En el ámbito de la inflación, el BCN presenta un rango de proyección del 3.0% al 4.0% para 2024. Este marco se configura en un contexto de disminución de la inflación internacional. Es relevante subrayar que la política cambiaria también desempeñará un papel crucial, marcando un hito al establecer una tasa de deslizamiento cambiario del 0% para este año.
Este enfoque estratégico del BCN refleja la precaución y la adaptabilidad necesarias en un entorno económico global dinámico, asegurando la estabilidad de precios para respaldar el crecimiento sostenible. “La economía nicaragüense se mantiene resiliente en una trayectoria estable de crecimiento, respaldada por políticas macroeconómicas adecuadas”, indica el BCN en su informe.
A pesar de estas perspectivas alentadoras, es crucial reconocer los posibles desafíos, como la volatilidad en los mercados internacionales y eventos climáticos extremos que podrían afectar la economía nicaragüense. La resiliencia y la capacidad de adaptación serán esenciales para mantener el impulso positivo.