Mientras Europa busca alternativas al gas ruso de cara al invierno, el gas natural licuado (GNL) es una de las opciones más codiciadas, lo que ha provocado un aumento significativo de las importaciones en los últimos meses. Alemania, que hasta ahora dependía en gran medida de las importaciones de gas natural a través de gasoductos desde Rusia, incluso ha anunciado planes para construir tres terminales de importación de GNL, que serán las primeras del país.
La economía que más se ha beneficiado hasta ahora de este cambio en la política energética ha sido Estados Unidos. La Administración de Información Energética (EIA, por sus siglas en inglés) ha anunciado esta semana que Estados Unidos se ha convertido en el mayor exportador de GNL del mundo durante los primeros seis meses de 2022, el 71% del cual terminó su viaje en Europa. Como muestra esta infografía, incluso antes de la guerra en Ucrania y la consiguiente crisis energética, Estados Unidos ya era uno de los mayores exportadores de esta forma líquida de gas natural.
En 2021, Australia, con un volumen de exportación de 108.100 millones de metros cúbicos, fue el principal exportador de gas natural licuado. Qatar ocupaba el segundo lugar, seguido de Estados Unidos. Respecto a las importaciones, China lideró el ranking en 2021, importando 109.500 millones de metros cúbicos de este recurso energético. Japón se situó en segunda posición, con 101.300 millones de metros cúbicos importados. En 2021, el volumen total del comercio mundial de GNL ascendió a 516.000 millones de metros cúbicos.