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Bebidas alcohólicas

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En palabras simples la cerveza es una bebida alcohólica elaborada a partir de azúcares obtenidas de cereales y otros granos (principalmente cebada y trigo), saborizada y aromatizada con lúpulo (entre otras hierbas y aditivos), que luego son fermentados en agua con levaduras del género Saccharomyces.

La técnico superior en dietética y coach nutricional Susana León afirma en su Artículo informativo sobre “Cerveza y Mitos de la bebida del verano”, asegura que “el alcohol es un tóxico y se ha demostrado que incluso en pequeñas cantidades empieza a liberar etanol y acetaldehído, el carcinógeno más común del mundo, presente en numerosos alimentos fermentados”. por ende por pequeños o largos tragos esta especialista menciona que  no se  ha garantizado por científicos  ningún beneficio  hasta el día de hoy.

De la cerveza se ha dicho que engorda mucho, que es nutritiva, y que si se consume con moderación puede proteger de determinadas enfermedades. Se dice también que la cerveza sin alcohol puede ayudarnos a combatir el dolor de forma más efectiva que el ¨paracetamol¨ y que su consumo puede proteger del riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Es muy simple desmontar este mito, puesto que: la cerveza tiene alcohol. El alcohol es la sustancia alimenticia que más calorías aporta por gramo después de la grasa (9 Kcal cada gramo de grasa, seguido de 7 Kcal cada gramo de alcohol, contra las 4 Kcal por gramo que aportan los carbohidratos y las proteínas). Ergo: aporta calorías, y muchas.

Según datos del Informe Socioeconómico del Sector de la Cerveza en España del año 2018 (el último disponible hasta la fecha), elaborado por Cerveceros de España y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la cerveza es la bebida fría más consumida fuera del hogar, de modo que hasta un 80% del gasto en cerveza tiene lugar en hostelería.

De tal forma entonces, que la cerveza aporta casi nada o nada en cuanto a nutrientes se refiere. Es decir, que no nutre. Además de no hidratar ni ser buena para el corazón, no nutre. De hecho, el exceso de alcohol, como hemos visto, deshidrata y desnutre, tomando en cuenta entonces, que si aporta calorías  pero que NO tiene ningún tipo de nutrición al cuerpo humano.

 

Cerveza, vino, ron, tequila o aguardiente, la industria de las bebidas alcohólicas en Latinoamérica deja importantes ingresos a los países que las producen y comercializan. Las estadísticas del año 2020, muestran cuán importante es esta industria en la generación de ingresos en la región y cuáles son los países que destacan por tipo de bebida.

La calidad y el sabor de las bebidas alcohólicas de América Latina le han merecido reconocimientos internacionales. Sin embargo, en los últimos años la bebida alcohólica con mayores ingresos generados en la región sudamericana continuó siendo la cerveza.

Las marcas más destacadas de este tipo de bebida fueron Corona, Skol y Brahma, posicionadas como las tres más valiosas en Latinoamérica. La cerveza brasileña y mexicana  alcanzaron el tercer y cuarto puesto entre los principales productores cerveceros a nivel mundial.

En el sector vinícola destaca América del Sur, especialmente Argentina y Chile que, en años recientes, se han posicionado como los dos grandes productores vinícolas de la región. Concretamente, ambos países produjeron más de 10,000 hectolitros de vino en 2020.

Durante ese mismo año, la superficie dedicada a viñedos, tanto en Chile como en Argentina, fue muy similar. El país del Río de la Plata dedicó aproximadamente el 45% de la superficie de viñedos de uva tinta a la variedad Malbec.

En México, la industria del tequila se encuentra actualmente en expansión con un valor de ventas que superó los 44.600 millones de pesos mexicanos en 2020. Del mismo modo, el volumen de producción ha tenido un crecimiento constante en los últimos cuatro años hasta situarse por encima de los 374 millones de litros producidos en 2020, duplicando así el volumen registrado en el año 2000. En ese año, el tipo con mayor cuota de mercado fue el tequila blanco, que representó un 48% del valor total de las ventas de tequila en ese país.

Una de las bebidas más asociadas al Caribe es el ron. La bebida destilada a partir de la caña de azúcar se ha vuelto una de las más conocidas mundialmente. Las marcas Bacardi (Bermuda) y Captain Morgan (Jamaica) se posicionaron como la segunda y tercera con mayor volumen de ventas de ron a nivel mundial, únicamente detrás de la marca filipina Tanduay. Otra de las bebidas procedente de la caña de azúcar que ha ganado popularidad es la cachaçao cachaza, con la marca brasileña Pitú como uno de sus estandartes a nivel mundial, al registrar unas ventas superiores a los 11,8 millones de cajas de 9 litros en 2020.

En cuanto a los licores con origen distinto de la caña, el pisco es uno de los más aclamados. Se trata de una clase de aguardiente de uvas, producido generalmente en Chile y Perú, que también ha ganado mayor relevancia en los últimos años. La marca chilena Mistral se ha convertido en una de las más importantes en volumen de ventas, alcanzando los 1,6 millones de cajas de 9 litros en 2020.

(Con información de Statista)