(Efe)»Son muchos desafíos, todo el mundo los conoce, pero hay un reto fundamental en el tema del cambio climático, Honduras es uno de los países más afectados en el mundo por los efectos del cambio climático», subrayó Segura.
El diplomático español afirmó que la Unión Europea «quiere apoyar» a Honduras a adaptarse al cambio climático y «cumplir sus compromisos» con el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático de 2015.
«La Unión Europea y sus Estados miembros han apostado muy fuerte por la lucha contra el cambio climático, como el motor de recuperación económica y el horizonte que queremos alcanzar», explicó.
En ese sentido, indicó que la UE destinará «más recursos» a Honduras, considerado uno de los países más vulnerables a los embates de la naturaleza, y la región centroamericana para paliar los efectos del cambio climático.
«Tenemos muchos compromisos en materia de reducción de gases de efecto invernadero, adaptación de la agricultura, educación por parte de la sociedad», enfatizó Segura.
RECUPERACIÓN ECONÓMICA
La recuperación de la economía hondureña tras la pandemia de covid-19, que deja en el país cerca de 9.700 muertes y más de 363.000 contagios en 18 meses, es otro de los retos de Honduras, señaló.
El diplomático recordó que la UE lleva «muchos años» apoyando a Honduras en la creación de «empleo digno, estable y de calidad» que contribuya a convertir el «círculo vicioso de la pobreza en un círculo virtuoso».
Según el Banco Central de Honduras, la actividad económica del país centroamericano creció un 12,6 % entre enero y julio pasado, una mejoría impulsada por el dinamismo y adaptación progresiva de los hogares y las empresas a la «nueva normalidad» impuesta por el coronavirus.
La economía de Honduras se contrajo un 9 % en 2020 debido al impacto de la crisis sanitaria por la pandemia, una situación agravada por el paso devastador de las tormentas tropicales Eta e Iota, que azotaron Centroamérica en noviembre pasado.
Alrededor de 500.000 personas perdieron su trabajo en 2020 como consecuencia del parón provocado por la covid-19 y los efectos de Eta e Iota en Honduras, cuyas pérdidas superan los 4.100 millones de dólares, según estimaciones de la Comisión Económica para América latina y el Caribe (Cepal).
CIFRAS PREOCUPANTES DE VIOLENCIA DE GÉNERO
Segura dijo que Honduras también tiene un «reto enorme» en materia de derechos humanos, un tema «fundamental» para la Unión Europea, que financia en el país programas orientados a fortalecer el sistema Nacional de Protección de Derechos Humanos.
«Tenemos un compromiso fuerte con los defensores de derechos humanos, lo que queremos es lo mismo que para nuestros ciudadanos: que los derechos humanos básicos se respeten en el país, se puedan defender sin violencia, sin criminalización», subrayó.
La igualdad de género es una tarea pendiente en Honduras, señaló el diplomático, quien considera que el país tiene «datos muy preocupantes» sobre violencia contra mujeres y niñas.
Destacó que el compromiso de la Unión Europea en la lucha contra la violencia contra mujeres y niñas en Honduras «es firme, innegociable y seguiremos apoyando» todos los esfuerzos para fortalecer la institucionalidad para «luchar contra esta lacra».
La violencia de género es «otra pandemia que azota al país», indicó Segura, quien señaló que en Honduras las violaciones a los derechos humanos tienen «causas profundas y estructurales».
Según cifras del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah), el país registra este año la muerte violenta de al menos 200 mujeres y más del 90 % de esos crímenes siguen impunes.